La verdad que me alegro mucho por Preciado. Siempre fui reticente a su despido, pero tengo que reconocer que cuando el Sporting se puso como colista de la primera división, pensé que se necesitaba un revulsivo, y ese revulsivo solo se podía conseguir echando al entrenador. Manolo se merecería remontar el vuelo, se merecía acabar la temporada, y se merece ser ovacionado y acabar como un señor en el Sporting, sea en primera o en segunda, pero preferiblemente la primera opción.
El momento actual que atraviesan ciertos jugadores es magnífico y es una de las razones de las tres victorias consecutivas del conjunto rojiblanco. Barral, De las Cuevas, Gregory..son jugadores que en estos 3 últimos partidos han vuelto a jugar como se espera de ellos, y eso el equipo lo ha notado. El buen estado físico y anímico se junta al cambio de sistema en el mediocampo. La entrada de un hombre mas junto con Eguren y Rivera da mas solidez al mediocampo, y por tanto se mejora la posesión y la circulación de balón. Ese tercer hombre es en lo últimos partidos Nacho Cases, quién parece haber transmitido mas atrevimiento y desparpajo a sus compañeros, pero el puesto se lo disputa André Castro, que en el partido del sábado marcó y dio una esplendida asistencia a Nacho Novo.
Y es que en el Sporting se ha instalado el optimismo. Los disparos que antes salían rozando el palo, ahora entran, los balones que antes sacaban los defensas contrarios debajo de la portería, ahora acaban en la red y antes que la defensa hacía aguas por todos lados, ahora parece un muro de hormigón. Solo hay un asunto que sigue trayendo problemas en el seno del club rojiblanco, y es el de José Ángel. El jugador se irá o se quedará, y lo sabremos en el transcurso del día de hoy, pero en mi opinión es preferible venderlo antes que se quede mal a gusto, cobrando, y siendo pitado por la afición. José Ángel, tu billete es solo de ida.
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